3. Té
Esta bebida reconfortante y altamente personalizable está cargada de antioxidantes, que son tu mejor línea de defensa contra el daño de los radicales libres. Cuando los radicales libres pueden dañar las células, las debilitan y son vulnerables al cáncer. Un antioxidante particular en el té, llamado kaempferol, se ha demostrado en investigaciones que reduce el riesgo de cáncer, especialmente en los cánceres reproductivos.
La Escuela de Salud Pública de Harvard recomienda consumir entre 10 y 12 miligramos de kaempferol por día. Con unas cuatro tazas será suficiente. No te preocupes si no quieres tomar mucho té. Otras fuentes de alimentos incluyen frutas como manzanas, melocotones, moras, frambuesas, uvas y tomates (técnicamente son una fruta). Las verduras ricas en kaempferol son el brócoli, las coles de Bruselas, las papas, las cebollas, la calabaza, las judías verdes, los pepinos, la lechuga y la espinaca.